Abril 2023

Espacio de reflexión para acompañar el crecimiento de nuestros hijos.

Este mes les proponemos los siguientes temas:

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Cuidado con el amor ciego hacia nuestros hijos (o padres).

No todos las formas de amar son sanas.

Cuando los dos crecemos, es saludable. El problema surge cuando quieres y quieres, pero es a costa de perder una parte de ti mismo importante. Ese es un amor ciego, que nos lleva a espirales que pueden llegar a ser autodestructivas para ti o para la otra persona. En el caso de la pareja, lo reconocemos fácilmente cuando uno está tan “enganchado” por alguien que le lleva a perder la cabeza (menos mal que el enamoramiento tiene sus hormonas oscilantes que pasado un tiempo nos hacen recuperar la razón).

El problema surge en espacios mucho más sutiles, más controvertidos, como son la relación entre padres e hijos. Hay padres que quieren a sus hijos profundamente, con toda la buena fe del mundo, pero sin embargo, están creando relaciones que no son positivas para ninguno de los protagonistas.

Querer y querer pero sacrificando todo cuanto tenemos, es un flaco favor que nos hacemos como padres y que le hacemos a nuestro hijo. Es un tipo de amor ciego, muy difícil de reconocer en uno mismo y, como siempre, muy fácil de ver en otros y sobre todo en quien se ha separado o al que no le va bien la relación con su pareja. Veamos cuándo vivimos el riesgo de caer en el amor ciego:

  • 1. Cuando te va mal en la pareja y proyectas de manera inconsciente la falta de cariño en uno de tus hijos. Se genera un vínculo muy especial, pero hay dos riesgos: no dejas espacio a reconstruir tu vida con una nueva pareja (el espacio que no le corresponde lo ocupa tu hijo) y segundo, se corre el riesgo de que ese hijo crea que sus futuras parejas no están a la altura del cariño que le dio su papá o su mamá (lo que llamamos vulgarmente enmadrado oempadrado, solo que ya con pelo en pecho). Y seguro que conocemos a más de uno con un vínculo excesivo a sus padres y posiblemente sea por un amor ciego entre su progenitor y él o ella. Si alguien está muy empadrado o enmadrada o “hijodrado e hijadrada” (perdón por el vocablo inventado) es difícil que tenga espacio para una relación de pareja saludable.
  • 2. Cuando vives una separación y por culpa o por soledad, colocas a tu hijo en el absoluto epicentro de tu vida a costa de sacrificar cualquier proyecto personal y profesional. Es una variante de la anterior, que ocurre muchísimo en las separaciones y, en especial, en el progenitor que ha perdido la custodia (normalmente, el padre). Los hijos se convierten en una obsesión, muy superior a cuando incluso vivían juntos en familia, y vuelven a colocar en ellos un amor ciego que no les corresponde con un altísimo sacrificio personal.
  • 3. Cuando como padre le recuerdas una y otra vez lo durísimo que fue haberle tenido, la cantidad de sacrificio que te supuso, las renuncias que tuviste que hacer y etc… Se busca un constante reconocimiento absurdo. Seamos sinceros: la decisión es personal. Si tenemos un hijo no es porque él nos haya escrito una carta pidiéndonos nacer o ser adoptados. Lo hemos decidido (o hemos asumido un riesgo sabiendo cuál podría ser la consecuencia). ¿Cuál es el precio desde esta actitud que le hacemos pagar a nuestro hijo? La culpa. Desde la culpa hacemos muchas tonterías, como rechazar al padre que te repite la misma cantilena de lo mucho que sufrió o evitar tener hijos o tantas otras decisiones inconscientes, que pueden ser también igualmente absurdas.
  • 4. Cuando esperas que tu hijo cumpla con tus sueños no conquistados por ti mismo. Otra tontería inconsciente que nos lleva a sobredimensionar la agenda extraescolar de los niños y a hacerles vivir una vida que ellos no han escogido. No olvidemos que los hijos, sobre todo de pequeños, buscan agradar a sus padres y pueden estar dispuestos a sacrificar sus propios deseos en aras de sus progenitores… y esa decisión de adultos les puede pasar factura a la relación.

En definitiva, el amor hacia los hijos es posiblemente el más intenso y el más puro que podamos sentir. Llegaríamos a dar la vida por ellos, pero dicho esto, reconozcamos algo políticamente incorrecto: además de padres, somos algo más, somos personas que tienen parejas, familia, amigos, proyectos profesionales, aficiones…, aunque podamos pensar que esa parte de nosotros no sea tan importante. Hacer girar absolutamente toda nuestra vida en torno a nuestros hijos (al igual que toda nuestra atención), tiene consecuencias negativas para ellos y para nosotros mismos como hemos visto. Si queremos tener hijos autónomos y libres en sus decisiones, aprendamos a controlar nuestros amores ciegos, porque les hacemos un flaco favor a ellos y también a nosotros mismos.

Fuente:
Autora: Pilar Jerico (Empresaria, escritora y conferenciante española)
Fecha publicación: Junio 2016

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Intolerancia a la frustración, una bomba de tiempo emocional.

Tolerar la frustración es aceptar que no siempre podremos obtener lo que deseamos, pero esto no ha de generarnos sufrimiento.

La vida no es perfecta, y tampoco es controlable. Está repleta de situaciones y desenlaces que se alejan, en gran medida, de nuestras expectativas. Forma parte de nuestro proceso madurativo aprender a aceptar y gestionar esta realidad. No obstante, cuando esto no se logra y crecemos con una baja tolerancia a la frustración, habremos de hacer frente a mucho sufrimiento.

Cuando algo no sucede del modo esperado tenemos dos opciones: aceptarlo y seguir adelante o estancarnos en la negatividad, la violencia y el rol de víctima. En ningún caso cambiar lo sucedido es una opción. Entonces, ¿qué decides?. La rigidez trae malestar, la flexibilidad oportunidades.

La tolerancia a la frustración en la infancia

Durante la infancia aún no hemos desarrollado por completo nuestras capacidades cognitivas, lo que nos lleva a ser impulsivos e impacientes. Para los niños es complicado demorar la gratificación, desean algo y lo quieren cuanto antes. Ante una negativa a sus anhelos pueden reaccionar con rabia, llanto, gritos y malos comportamientos.

Enseñar a los niños a tolerar la frustración es una de las tareas más complicadas de la educación, pero es completamente necesaria. No siempre es posible obtener lo que queremos y esto no debe generarnos sufrimiento. Cuando a un niño no se le niega nada durante la infancia, se le priva de la posibilidad de desarrollar esta capacidad.

Algunos padres, en su afán por proteger a sus hijos del dolor y la decepción, les conceden todas sus peticiones. Ceden y tratan de resolver, por anticipado, cada necesidad y deseo del niño. De forma que este no haya de enfrentarse a ningún tipo de incomodidad.

Se trata de actos que parten de la buena intención, de un pensamiento amoroso: “ya tendrá tiempo de sufrir cuando crezca”. Sin embargo, es necesario enfrentar la frustración en la infancia para aprender a tolerarla. De lo contrario, en la vida adulta está se presentará en un grado mucho mayor y no contaremos con las herramientas necesarias para hacerle frente.

10 consejos para desarrollar tolerancia a la frustración

  • SE UN BUEN EJEMPLO: Si tu hijo te ven reaccionar de manera negativa o violenta ante una situación frustrante, harán lo mismo en el futuro. Si tu hijo te ve insultar a otro conductor por la calle, o pegarle a alguien con quien estas discutiendo, esa será su manera de enfrentar sus propios problemas . La actitud positiva de los padres al enfrentar contrariedades, situaciones incomodas y frustrantes, es la mejor manera para que los hijos aprendan a responder ante eventos desagradables que la vida les puede presentar.

  • PERMITE QUE EXPERIMENTE TODO TIPO DE EMOCIONES: Agradables o desagradables. No intentes complacerlos en todo momento para evitar que llore o se sienta triste. Pierde miedo a su rabia y a su tristeza, son emociones pasajeras. Enseña que pueden expresar emociones sin lastimar a nadie.

  • ESTABLECE LIMITES A LAS CONDUCTAS INACEPTABLES SIN SENTIR CULPA: La culpa es uno de los enemigos íntimos de la crianza. Los límites claros les enseñan a contenerse, es decir, a no actuar impulsiva e imprudentemente. Esto es esencial para que madure neurológicamente y así sea capaz de tolerar la frustración.

  • DISTINGUE ENTRE DESEO Y NECESIDAD: Ten claro que tu obligación como padre o madre es atender sus NECESIDADES físicas, emocionales e intelectuales (Comida, educación, protección, bienestar, afecto)…pero sus DESEOS puedes complacerlos o no. No son tu obligación. Tener el ultimo celular, o ese juguete costoso, o un paseo, son deseos que podrán ser complacidos según la circunstancia, no es una obligación.

  • NO CEDAS ANTE SUS BERRINCHES O RABIETAS: empatiza con su enfado, tristeza, etc, pero mantente firme en tu decisión. “Entiendo que te enoje mucho que no te pueda llevar en este momento con tus amigos, pero tengo trabajo.” De lo contrario tu hijo, se dará cuenta que sus explosiones te intimidan y serán un medio efectivo para manipularte y obtener lo que quiera.

  • ELIMINA EL DRAMATISMO: Una negativa no es el fin del mundo. Tu adolescente podría decirte que le estas arruinando la vida porque no la dejaste ir a una fiesta, o podría ponerse violento si no logra su deseo. Nota que esto es una exageración emocional, una dramatización. Conserva la calma y protégete emocionalmente. Mantente firme. Nadie va a morir si ese deseo no se cumple. Tu hijo paulatinamente deberá aprender a autorregular ese dramatismo.

  • NO LE FACILITES TODO: Ofrécele ayuda solo cuando sea verdaderamente necesaria. Sobreproteger a tu hijo es el enemigo numero uno de la tolerancia a la frustración. La sobreprotección debilita al no permitir la experimentación necesaria para aprender de los errores y enfrentar retos por sí mismos. El niño sobreprotegido no aprende a tener una actitud positiva frente a sus fracasos.

  • PERMITE QUE SE ESFUERCE: El esfuerzo desarrolla el carácter y fortalece la voluntad. Es un componente esencial para que el hijo tenga éxito en la vida.

  • DALES DEBERES Y RESPONSABILIDADES DE ACUERDO CON SU EDAD: Esto ayudara a que se sientan útiles y aprendan a servir a otros. Nada más importante para dejar el egocentrismo del niño pequeño. En la vida hay que recibir y dar, la reciprocidad es la base de las relaciones afectivas, si no hay reciprocidad las relaciones se vuelven toxicas. Es importante que tus hijos aprendan esto desde muy pequeños.

  • ENSEÑALE A PERSEVERAR: Tener la capacidad de sostener el esfuerzo desarrollara su paciencia y asegurara que logre las metas que se proponga. Si tus hijos aprenden que siendo constantes pueden tener éxito, sabrán sobreponerse a la frustración inicial cuando las cosas no se resuelvan al primer intento.

Fuentes:
La Mente es Maravillosa
Elena Sanz – Febrero 2022
 
Escuela para padres
Vidal Schmill

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Adolescentes y el celular: Cómo regular su uso y reducir los conflictos.

Es importante conformar unas reglas y normas, con unos límites de usos horarios asumidas y consensuadas del uso del móvil entre adolescentes y sus padres.

Estas reglas estarán marcadas por la edad y madurez nuestros hijos. Debemos hacerlo responsables y que su comportamiento adecuado les lleve a tener unos determinados y nuevos privilegios que les encamine a una autonomía. Además debemos de dar ejemplo sobre cómo usamos nosotros el móvil de forma racional: no usarlo a las horas de las comidas ni cuando estemos compartiendo el tiempo con ellos.

Lo importante es enseñar a nuestros niños y adolescentes a hacer un buen uso de las nuevas tecnologías y a relacionarse de forma adecuada con su entorno familiar y social.

Vidal Schmill, psicopedagogo y especialista en desarrollo humano, nos propone un acuerdo que padres e hijos deben asumir para un uso seguro del celular en menores. Debe ser leído y firmado por la familia y debe respetarse en el futuro.

Reglamento para el uso de celular, tableta, computadora, videojuego o dispositivo con conexión a internet

Querido(a) _____________(nombre del hijo o hija), como tus papás ________________ (nombre de ambos padres), hemos delimitado las siguientes reglas para el uso adecuado de tu cualquier dispositivo con conexión a internet.

Estas reglas deben ser cumplidas para que puedas conservarlo. En caso contrario, será retirado por el tiempo que nosotros consideremos apropiado.

  • 1. Tu dispositivo con conexión a internet es nuestro, nosotros te lo prestamos ya que pagamos el equipo y el servicio de internet. De hecho, está a nuestro nombre. Por lo anterior, además de ser los propietarios, somos legalmente responsables por el uso que se le dé.

  • 2. Siempre deberemos conocer sus contraseñas de acceso. Asimismo, podremos solicitar revisar tu celular o cualquier aparato con conexión a internet y sus contenidos cuando lo consideremos necesario.

  • 3. Cada vez que nosotros te llamemos (mamá, papá y casa), deberás contestar sin excepción. De igual forma, deberás hacerlo con la misma educación y respeto que nosotros te hemos inculcado y como hemos mostrado que nos comunicamos con el resto de las personas.

  • 4. Entregarás a alguno de nosotros tu celular y todos los equipos con conexión a internet a las 21:30 h [9:30 pm] estando en casa y estará apagado toda la noche. Lo devolveremos a la mañana siguiente antes de ir a la escuela (si la escuela lo permite) si no fuera así, hasta que regreses de la escuela. En fines de semana, deberás entregárnoslo a las 22:30 h [10:30 pm] y será devuelto por la mañana, no antes de las 9:00 h. Cuando no estés en casa, deberás llevar contigo tu dispositivo móvil con suficiente batería y estar siempre disponible para darnos una respuesta; tu seguridad es nuestra prioridad. Para llamar en horarios adecuados; piensa que, si no te comunicas a casa de alguien porque pueda responder algún adulto, tampoco lo hagas a otros dispositivos móviles. Es importante respetar a las otras familias como nos gusta que nos respeten a nosotros.

  • 5. Podrás llevar tu dispositivo móvil a la escuela (sólo si en la escuela lo permiten). Su uso será únicamente por si requieres comunicarte con nosotros o para gestionar algún trabajo en equipo con tus compañeros si tus profesores así lo solicitan y lo permiten. Durante las clases, deberá estar guardado. Si recibimos una llamada de atención por parte de la escuela, tu celular será retirado por el tiempo que nosotros delimitemos.

  • 6. Si tu dispositivo móvil sufre un accidente, se pierde, se moja, se cae en el baño, se golpea contra el suelo o se esfuma en el aire, eres responsable de los costos de reparación o sustitución. deberás hacer una propuesta de cómo cubrirás este gasto; tus ahorros serán buena opción para ello.

  • 7. No utilices la tecnología para hacer tonterías (memes, ridiculizar a otros, bromas pesadas), mentir o lastimar a otra persona. No te involucres en conversaciones que sean dañinas para los demás. Sé buen amigo y compañero, sé una buena persona como siempre lo has sido siempre. Recuerda que, ser cómplice, difundir o no denunciar nos hace responsables al igual que la persona que no hace lo correcto. No te expongas, pero pídenos ayuda.

  • 8. No envíes ningún correo electrónico o mensaje ya sea de texto o audio, nada a través del dispositivo móvil que no dirías en persona. Tampoco algo que no dirías en voz alta y en presencia de padres de familia o personas de autoridad; regula tu expresión y forma de relacionarte.

  • 9. Tienes prohibido acceder a pornografía. Si requieres información al respecto, o respecto al tema de sexualidad, puedes acercarte con nosotros o algún especialista. La pornografía no muestra la realidad de cómo los seres humanos nos vinculamos sexualmente; las emociones son fundamentales para ello y debemos cuidarlas al igual que nuestro cuerpo.

  • 10. Pon tu dispositivo móvil en silencio y déjalo a un lado al estar en compañía de otras personas o espacios públicos. Por ejemplo; en restaurantes, en el cine o mientras hablas con otra persona. De igual forma, mientras comemos en familia, los dispositivos móviles quedarán a un lado para permitirnos pasar un buen momento juntos.

  • 11. No envíes, ni recibas imágenes de tus partes íntimas o de las partes íntimas de cualquier otra persona. No te rías si sabes que esto le sucede a alguien. Todos estamos tentados en hacerlo por la gran interacción que podemos tener a través de un dispositivo móvil; desafortunadamente no es seguro para nadie. Siempre será una mala idea; una imagen compartida jamás será sólo tuya y tampoco tendrás el control de su distribución aunque la borres.

  • 12. No hagas miles de fotos o videos. No hay necesidad de documentarlo todo. Vive tus experiencias; quedarán en tu memoria y eso es lo más importante. Por tu seguridad, no hagas publicaciones que proporcionen información de tus actividades, ubicación y detalles que den acceso a información que no te gustaría que todos conocieran. No interactúes, ni aceptes desconocidos en ninguna de tus redes sociales.

  • 13. En casa, deja tu móvil lejos de ti; no lo perderás y es importante aprender a vivir sin tu celular a un lado tuyo. No tienes que estar “conectado” todo el tiempo a tus redes sociales o chats. Disfruta de quienes tienes cerca. Es importante despejar la mente y tener espacios a solas y en silencio. Asimismo, conectar con lo que te rodea. Ante cualquier dificultad, nos sentaremos y hablaremos de ello. Seguramente cometerás errores y volveremos a empezar, perderás el privilegio del uso de tu dispositivo móvil y haremos ajustes con relación a nuestras experiencias para su uso y para el manejo seguro de internet, redes sociales y demás. Tanto tú como nosotros estamos aprendiendo. Esperamos que puedas cumplir con este reglamento que, nos permitirá cuidar mejor de ti. Eres lo más importante para nosotros.

___________________________ (Nombre y Firma de hijo o hija)

___________________________ (Nombre y Firma de padres de familia)

Fecha: _______/_______/_______

Fuente:
“Escuela para padres”
de Vidal Schmill

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